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lunes, marzo 06, 2006

MUJER… POLITICA… COMUNISTA

GLADYS MARIN…

“Para mi ser comunista es un gran orgullo, es pertenecer a las ideas más avanzadas de todos los tiempos.
Comunismo es lo común para todos, ideas de libertad total, que nadie nos coloque cercos ni fronteras, poder caminar por la vida libremente...
Las ideas del comunismo van a permanecer, se van a desarrollar, a la humanidad le queda tanto por caminar.
Si tenemos que tomar la proporción de lo que somos, nos vemos como un pedazo, un grano de arena, pero al mismo tiempo vemos que hay que acelerar la situación, no podemos permanecer de brazos cruzados esperando que las cosas caigan tranquilamente.
Tenemos que luchar hoy más que ayer...
Estoy convencida de alma y razón que otro mundo es posible y necesario”



UNA VIDA MILITANTE

Nació el 16 de julio de 1941 en Cureptó de madre maestra y padre campesino. A los pocos años con su madre y cuatro hermanas se trasladaron a Talagante, allí hizo sus estudios primarios y participó en movimientos cristianos.

Siendo adolescente se fue a vivir sola a la capital chilena, Santiago, para ingresar en la Escuela Normal e iniciar su formación para la docencia. Comenzó a asistir a las reuniones de la Federación de Estudiantes Normalistas y precisamente allí conoció y luego ingresó a las JJCC (Juventudes Comunistas) recibiendo su carné de militante en 1958.

Ya como maestra impartió clases a niños deficientes mentales en un hospital psiquiátrico.

En 1960 fue elegida para el Comité Central de las JJCC, que realizaban un amplio trabajo de masas. En ese tiempo, el PCCH (Partido Comunista Chileno) recién salía de diez años de ilegalidad dictaminada por una ley de defensa de la democracia.

En 1963 se convirtió en Secretaria General de las JJCC y se destacó como dirigente del Comando Juvenil por la candidatura de Salvador Allende para la presidencia de Chile.

Jóvenes alegres y esperanzados, dialogando con todo el pueblo, construyeron parques infantiles, espacios recreativos y culturales, etc. Fue una experiencia muy positiva aunque no lograron el objetivo electoral; en las elecciones de 1964 fue designado el demócrata cristiano Eduardo Frei para presidir el gobierno chileno.

En 1965, Gladys resultó electa diputada por el segundo distrito de Santiago, que comprendía varias comunas de neta composición proletaria.

Las JJCC, bajo su dirección, trabajaron por la reforma universitaria y desarrollaron una gran labor solidaria internacionalista, se donaba sangre y se recolectaba dinero para un hospital en Vietnam y se realizaron nutridas marchas antiimperialistas desde Valparaíso a Santiago.


Con el triunfo de la Unidad Popular en 1970, nombrado presidente Salvador Allende, se abrió en Chile un nuevo horizonte; las JJCC, junto a otros jóvenes de izquierda, fueron verdaderos artífices de ese período histórico inolvidable; además de realizar una intensa labor de propaganda política, surgieron las Brigadas de Trabajo Voluntario que se hicieron presentes donde se las necesitara, construyendo caminos, canales de riego y aulas; distribuyendo productos de primera necesidad, organizando asociaciones, etc. Realizaron también una multitudinaria marcha contra el fascismo y la guerra civil desde Arica a Magallanes.


El golpe de Pinochet en 1973 interrumpió abruptamente el accionar popular y el mandato como diputada de Gladys Marín. Inmediatamente su nombre apareció en la lista de “los más buscados” por los represores; debió pasar a la clandestinidad y por decisión del Partido y contra su voluntad, se asiló en la Embajada de Holanda en diciembre de 1973, hasta que le dieron un salvoconducto y en julio de 1974 pudo viajar a Moscú.


En 1976, en un operativo que terminó con la dirección clandestina del PCCH, fue detenido y hecho desaparecer su marido Jorge Muñoz Puteis, con quien tuvo dos hijos: Álvaro y Rodrigo. Precisamente, en 1998 Gladys fue la primera mujer que presentó una querella criminal contra el dictador Pinochet por la desaparición de su esposo.


En el exilio viajó y se multiplicó en diversas actividades de denuncia, defensa de los Derechos Humanos y solidaridad con su pueblo.

En 1978, con otra identidad y otro aspecto regresó clandestinamente a Chile y trabajó políticamente en el interior.

En 1984 asumió la Subsecretaría del PCCH y después del XX Congreso del Partido, que se hizo en 1994, fue elegida Secretaria General.

Cuatro años más tarde se presentó como candidata a la presidencia de Chile, planteando en su programa la construcción de una alternativa al sistema, organizando un amplio movimiento social y político que vaya efectuando los cambios profundos que el país necesitaba.

En septiembre de 2003 le detectaron un agresivo tumor cancerígeno cerebral y aunque fue operada en Suecia y recibió tratamiento en Cuba, su enfermedad se fue agravando día a día.


ENAMORADA DE CUBA

Gladys Marín estuvo por primera vez en Cuba en 1959 y según afirmó:

“Me enamoré de la Revolución y el sentimiento pasó a ser conciencia”.

En otra ocasión dijo:

“La Revolución Cubana fue y es parte fundamental de mi formación política y ética, le dio un impulso inmenso al movimiento popular que en esa época ascendía en Chile con Allende”.


En marzo de 2004, poco después del trágico 11-M de Atocha, recibió en La Habana la “Orden José Martí”. En esa oportunidad, ya gravemente enferma, pronunció un conmovedor discurso que parecía ser su legado y testamento, del cual se extraen algunos párrafos:

“Porque amamos la vida y luchamos por ella, aún en las más difíciles circunstancias, condenamos absolutamente el oscuro y demencial atentado terrorista realizado en Madrid. Pero este hecho es el resultado del clima de violencia y de guerras de invasión que han impuesto Bush y sus aliados.

Hoy, con mayor razón, la causa de la paz mundial y la resistencia al fascismo totalitario de Bush debe ser asumida por los pueblos... La tragedia de los pueblos, como el de Irak, Palestina y Haití, pueblos de pobres e invadidos, muestra la urgente necesidad de salir a las calles.

¡A las calles, a la rebelión!

Hay que resistir y no aceptar órdenes criminales.

No aceptar el genocidio por hambre y por enfermedades curables. No conformarse jamás ante esos rostros de niños que mueren de hambre o por balas...

En estos días Latinoamérica se estremece por el proceso bolivariano, que encabeza el Presidente Chavez, por el ejemplo de Cuba...

Hay que seguir desarrollando el pensamiento crítico y alternativo, porque existe una crisis profunda de la ideología neoliberal y tenemos que ayudar al surgimiento de un ideario nuevo. La batalla ideológica es lo esencial.

Martí, con su convicción precursora, con su acción adelantada mostró la importancia de esta lucha que hoy adquiere una relevancia principal...

Llevo a Chile esta Orden José Martí como una estrella que nos alentará diariamente en las luchas por el socialismo, por la vida y la libertad...”

A un año de su fallecimiento

16-Julio-1942

06-Marzo-2005

Simplemente, io